La nave espacial Lucy de la NASA, actualmente en camino al Sistema Solar exterior para estudiar los asteroides troyanos de Júpiter, tiene un problema con el panel solar. Poco después de su lanzamiento en octubre pasado, los ingenieros determinaron que uno de los dos paneles solares de Lucy no se abrió por completo. Si bien la nave espacial tiene suficiente potencia para funcionar, al equipo le preocupa cómo el panel desbloqueado podría obstaculizar el desempeño de Lucy en el futuro. En un intento por solucionar el problema, el equipo llevará a cabo un nuevo procedimiento el próximo mes que está diseñado para desplegar el panel solar por completo y asegurarlo firmemente en su lugar.
Los paneles solares redondos de Lucy están diseñados para desplegarse como un abanico, abiertos por un motor que enrolla una línea unida a los extremos de los paneles. Después del lanzamiento, un panel se desplegó perfectamente, pero el otro solo alcanzó unos 345 grados del círculo completo de 360 grados, dejando alrededor de 20 a 40 pulgadas de la línea de 290 pulgadas sin enrollar. Los riesgos de dejar el panel en su estado actual no están necesariamente relacionados con la generación de energía, sino más bien con la integridad estructural de la nave espacial bajo las tensiones del vuelo espacial. Según Karen Fox en el blog de la misión Lucy de la NASA, “el equipo está preocupado por el posible daño a la matriz si la nave espacial realiza una combustión del motor principal en su configuración actual”.
La solución propuesta, que se intentará durante la semana del 9 de mayo, implica volver a encender el motor principal del carrete, pero esta vez también hacer funcionar el motor de respaldo al mismo tiempo, aumentando el par con la esperanza de que el panel solar pueda ser abierto por la fuerza bruta. En otras palabras, la solución es tirar más fuerte de la línea y ver si se despliega.
Si bien esto suena como una solución radical, no se está haciendo a la ligera o sin previsión. Los ingenieros han estado realizando pruebas aquí en la Tierra durante los últimos meses, reproduciendo los problemas de Lucy, midiendo los riesgos de la maniobra y estimando la probabilidad de éxito. Sobre la base de estas pruebas, el equipo ha ideado un procedimiento de dos partes.
La primera parte, que tendrá lugar a principios de mayo, implicará poner tensión en la línea durante un breve período de tiempo, para garantizar que la nave espacial reaccione como lo predijeron las pruebas en tierra. Los datos recopilados de este paso inicial ayudarán a “afinar” el resto del procedimiento, que se llevará a cabo un mes después.
Durante el paso dos, los motores gemelos se encenderán nuevamente por un período más prolongado, con la esperanza de que sea suficiente para desbloquear el panel y dejarlo completamente abierto.
Todos los instrumentos de Lucy funcionan con normalidad y debería poder llevar a cabo su misión con o sin el panel completamente desplegado, pero ciertamente permitiría que el equipo descanse más tranquilo sabiendo que está fijado y que no causará problemas en el futuro. Después de todo, Lucy está programada para una misión de 11 años visitando 8 asteroides diferentes desde ahora hasta 2033. Ese es un gran viaje para hacer con un panel solar defectuoso.
Las actualizaciones sobre el progreso de Lucy estarán disponibles en Ingles en el Blog.
Artículo con fines divulgativos basado en el artículo original en Inglés.
Créditos: Scott Alan Johnston, Universe Today
Salvo indicación contraria este trabajo está licenciado por el autor bajo la licencia International Creative Commons Attribution 4.0